Familiares de personas desaparecidas en Guerrero, piden la destitución de Alejandro Hertz Manero

* Marchan esposas y familiares de personas desaparecidas en Atoyac en la década de los sesentas y setentas en la llamada “Guerra Sucia”

Chilpancingo, Gro., a 19 de febrero de 2023.- Hijos, esposas y familiares de personas desaparecidas en Atoyac en la década de los sesentas y setentas en la llamada “Guerra Sucia”, exigieron con una marcha a los mandos castrenses establecidos en Guerrero que avancen las investigaciones, y que haya castigo contra los militares que detuvieron, torturaron, asesinaron y lanzaron al mar a decenas de guerrerenses, y que se abran los archivos históricos que tiene en su poder la Secretaría de la Defensa Nacional para conocer el paradero de las víctimas.

Previo a su llegada a las instalaciones del Sexto Batallón de Ingenieros de Combate de la Secretaría de la Defensa Nacional, ubicado a un costado del boulevard “Vicente Guerrero frente a las instalaciones de la 35 Zona Militar, los manifestantes que pertenecen a diversos colectivos de desaparecidos, realizaron una marcha que inició en el Monumento a Las Banderas” situado en las avenida Lázaro Cárdenas, con dirección a las instalaciones militares.

Con megáfono en mano, los familiares de desaparecidos señalaron que este 19 de febrero en que se conmemora el “Día del Ejército” no hay nada qué festejar, porque en las décadas de los 60, los 70 y los 80, efectivos militares sacaron de sus casas en Atoyac a más de 600 de sus familiares para nunca más volver a verlos.

Manifestaron su enojo porque hasta ahora no han dado resultado las investigaciones que realizan Comisión Nacional para el Acceso a la Verdad y el Esclarecimiento Histórico de Violaciones Graves a los Derechos Humanos que encabeza el subsecretario de Gobernación Alejandro Encinas; la Comisión Nacional Ejecutiva de Atención a Víctimas, la Comisión Nacional de Búsqueda, ni la Comisión Nacional de Derechos Humanos.

También señalaron que no ha dado resultados la Fiscalía General de la República con la detención de miliares involucrados en la desaparición de guerrerenses en la “Guerra Sucia, por lo que exigieron la destitución de su titular Alejandro Hertz Manero, “por incompetente y omiso porque además no ha dado trámite a las averiguaciones previas presentadas e integradas en la Ciudad de México”.

Afirmaron que hay indicios que señalan que personal militar de la Fuerza Aérea Mexicana, aventaron al mar a sus familiares con latas de cemento en los pies para irse al fondo del Océano para nunca más ser vistos, a través de los llamados “Vuelos de la Muerte”.

Este día del Ejército Mexicano no hay nada que celebrar, no hay motivos para “hacerles un homenaje a las bestias”, queremos conocer la verdad, queremos saber dónde quedaron nuestros familiares, dijeron los oradores, quienes afirmaron que ninguno de sus parientes desaparecidos fueron detenidos en el monte con armas de fuego, “todos fueron sacados por soldados de sus domicilios y en las canchas; todos fueron golpeados, torturados, asesinados y desaparecidos”.

Acusaron al Ejército Mexicano de haber ejecutado un exterminio en Atoyac de Álvarez. Advirtieron que mientras no haya justicia para las decenas de familiares, seguirán en Guerrero las desapariciones y los asesinatos.

Antes de llegar al Sexto Batallón de Ingenieros de Combate, los manifestantes hicieron una parada en uno de los accesos a las instalaciones de la 35 Zona Militar en donde lanzaron consignas contra los militares y exigieron la verdad de las desapariciones.

Acordaron llevar a cabo la protesta principal en las instalaciones del Sexto Batallón, porque fue sede de la ceremonia oficial para conmemorar el 110 aniversario del Ejército Mexicano que comenzó a las 9:30 de la mañana, a la que asistió la gobernadora Evelyn Salgado Pineda.

A su llegada el evento había concluido. Sólo se limitaron a entregar documentos a representantes de las fuerzas castrenses, y colocaron en el portón metálico pancartas con largas listas de nombres y fotografías de desaparecidos en la “Guerra Sucia”, para posteriormente retirarse a sus lugares de origen.