El Halcón Peregrino: La termoeléctrica de Huexca: Samir, AMLO y el EZLN

En la madrugada del pasado miércoles 20 de febrero, en su domicilio de la comunidad de Amilcingo, Municipio de Temoac, Morelos, un comando autodenominado “Tlahuica”, acribilló y mató a balazos frente a su familia, a Samir Flores Soberanes, uno de los principales activistas que se oponía a la termoeléctrica de Huexca, Morelos, y quien conducía una estación de radio. Los agresores antes de retirarse, advirtieron que eso le pasó, por su oposición a la termoeléctrica.

Entre las diversas reacciones por el atentado en contra de Samir Flores Soberanes, hay quienes culpan del mismo, a los gobiernos federal, estatal y municipal, y exigían la cancelación de la consulta, porque –dicen– lleva sangre, y el esclarecimiento de la muerte de Samir, postura a la que en esencia, se suma el Ejército Zapatista de Liberación Nacional. Por su parte, el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, confirmó que la consulta proseguiría.

Ahora bien, sobre el atentado en contra de Samir Flores Soberanes, y la inculpación del mismo sobre el Presidente de México, viene a la mente de este opinante, que algo así le pasó al ex regente del entonces Departamento del Distrito Federal, Manuel Camacho Solís, con el magnicidio del candidato del Partido Revolucionario Institucional a Presidente de México, Luis Donaldo Colosio Murrieta en 1994…

En las primeras horas del primero de enero de ese año (fecha en que entraba en vigor el Tratado de Libre Comercio México-Estados Unidos-Canadá), irrumpe el hasta entonces desconocido Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), en el estado mexicano de Chiapas, tomando brevemente las cabeceras de 5 municipios (San Cristóbal de las Casas, Ocosingo, Chanal, Altamirano y Las Margaritas), y declarándole la guerra al Estado mexicano…

Esa irrupción, el inmediato nombramiento de Manuel Camacho Solís (por parte del Presidente Carlos Salinas de Gortari), como Comisionado para la Paz en Chiapas, y los continuos ataques de Camacho Solís a la candidatura de Colosio -entre otros factores-, provocaron que ésta no levantara lo suficiente, como para poder asegurar el triunfo en la elección presidencial, y en cambio, que aumentaran las posibilidades de Camacho Solís, de sustituir a Colosio Murrieta en la candidatura presidencial, si resolvía el problema de Chiapas a favor de la paz…

El asesinato de Colosio, ocurrido en 23 de marzo de 1994 (sin pruebas de que Camacho Solís hubiera participado en su autoría, y sin que le conviniera hacerlo, pues las sospechas inmediatamente hubieran recaído sobre él), lo hicieron culpable a los ojos de los colosistas, y extinguieron dichas posibilidades de sustitución…

Así con el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador… Teniendo altos niveles de popularidad, como para ganar dicha consulta, sería muy tonto de su parte, que hubiera ordenado el asesinato de un opositor a ella, a sabiendas de que con ello, en lugar de asegurar su triunfo en la consulta, lo hubiera complicado o lo frustrado… Por cierto, ¿qué es del EZLN? A 25 años de su aparición en Chiapas, ¿ya habrá contribuido sustancialmente, al mejoramiento de las condiciones de vida de los indígenas y campesinos pobres de ese estado?…

Salvo su mejor opinión, querido lector…

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