El Halcón Peregrino: Fobaproa/IPAB-Aeropuerto de Texcoco: La viga en el ojo ajeno…

En el pasado viernes 25 de enero en la Ciudad de México, Julio A. Millán Bojalil, presidente y fundador de Consultores Internacionales (CI), aseveró que cada uno de los mexicanos, pagará la cantidad de 3 mil 290 pesos, por la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), lo cual ha dado pauta a que muchos ciudadanos critiquen al actual Presidente de México, como un mal gobernante que ha comenzado mal su gobierno…

Ahora bien, al respecto cabe recordar –en contraste con tales críticas– que el rescate bancario de 1995, nos sigue costando a cada uno de los 107 millones de mexicanos, la cantidad de 12 mil 691 pesos, que aún no terminamos de pagar…

En efecto, el rescate del Gobierno Federal a los principales bancos de entonces: Bancomer, Banamex, HSBC Banorte e Inverlat entre otros, a junio del 2006, llegó a alcanzar la estratosférica suma de un billón 358 mil millones de pesos, es decir, el 15.4% del producto interno bruto (PIB) del 2005, de los cuales restaban por pagar unos 808 mil 730 millones de pesos, el 9.2% del PIB del mismo año, por concepto de pagarés de capitalización y compra de cartera vencida, rescate que como quiera que sea, se da a costa del Presupuesto de Egresos de cada año… Ello, de tal manera que a cada uno de los 107 millones de habitantes que tiene México (según reciente censo del INEGI), le toca pagar la cantidad de 12,691 pesos… Intervención del gobierno que se da, para resolver un fenómeno económico-financiero conocido como el «error de diciembre» (ocurrido en 20 de diciembre de 1994, al inicio del sexenio Presidente de México, Ernesto Zedillo Ponce de León [1994-2000]), que fue provocado por un mal comportamiento de los bancos (que no hacía mucho, habían sido devueltos a la iniciativa privada), reforzado tal comportamiento bancario, por una política económica que indujo un sobreendeudamiento de la economía, al pretender estabilizarla, para facilitar la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, a fines del sexenio del Presidente Carlos Salinas de Gortari (1988-1994), y por la incapacidad del Presidente siguiente, Ernesto Zedillo Ponce de León (ambos presidentes, emanados del Partido Revolucionario Institucional: PRI), para manejar adecuadamente la economía, convirtiendo una situación sin duda difícil de resolver, en una crisis de grandes proporciones… Posteriormente, en 1998, los precios internacionales del petróleo se derrumban, y con ello, el mecanismo de financiamiento del rescate bancario, en su versión original: Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa) y, en ese contexto, el Presidente Zedillo envía una Iniciativa de Ley a la Cámara de Diputados, que trataba de que la Federación asumiera una deuda estimada para febrero de 1998, en 552.3 mil millones de pesos, más accesorios financieros acumulables… Iniciativa que aprobaron los diputados federales del PRI y del Partido Acción Nacional en diciembre de 1998, y que finalmente resultó en la Ley de Protección al Ahorro Bancario, fundamento legal del Instituto de Protección al Ahorro Bancario… Lo anterior, según datos, análisis y conclusiones contenidos en el subcapítulo «Consideraciones del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática respecto al Informe de la Comisión de Investigación sobre el Instituto para la Protección al Ahorro Bancario», del Capítulo 4. «La última batalla para reducir el costo del Fobaproa», en la obra «Fobaproa: el co$to del rescate bancario», Volumen II, Juan Moreno Pérez, Grupo Parlamentario del PRD, Cámara de Diputados, Congreso de la Unión, LX Legislatura… Ello, sin tocar el punto del «Crack» del ’87, que dejó en la calle a miles de pequeños inversionistas, que creyeron en la Bolsa Mexicana de Valores, y muchas otras gracias más de los gobiernos últimamente «prianistas»…. Y mejor aquí le paramos… Así que antes de ver la paja en ojo ajeno, veamos la viga en el propio…

Salvo su mejor opinión, querido lector…

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *