Si se requieren $500 millones, que vaya Walton por la candidatura: López Rosas

*No pido de AMLO que me palomee, sino que no me vete, dice. *El ex alcalde de Acapulco buscaría ser gobernador como abanderado externo o como militante de Morena, si fuera necesario, adelanta. *Recorre el estado para pulsar sus verdaderas posibilidades, aclara. *Hay rudeza innecesaria en la política, opina. *El PRD perdió el rumbo, critica. *Se reúne el ex procurador con integrantes del Frepeg

-Hay quienes aseguran que para ser candidato a gobernador se requieren tener al menos 5 millones de pesos, y se ha mencionado a Luis Walton como posible candidato a gobernador por Morena, ¿cómo ve?

-Pues que vaya Walton con 500 millones; ya no tengo nada que hacer.

La pregunta había sido formulada por el periodista Juan Manuel Millán Sánchez, y la respuesta fue de Alberto López Rosas, ex presidente de Acapulco, quien acudió como invitado a la sesión del Frente de Periodistas de Guerrero (Frepeg) este sábado.

Tras la respuesta, se soltó una sonrisa que casi se volvió carcajada y que imitó Millán Sánchez. “Dios no me ha castigado, por eso no me ha vuelto millonario, y si me hubiera castigado –con los millones- ya les hubiera dejado de  hablar a ustedes”, continuó con la broma.

López Rosas actualmente está recorriendo el estado de Guerrero con el objeto, dice, de pulsar el ánimo de la gente y decidir después si busca la candidatura de Morena a la gubernatura, ya sea como externo o como militante de este partido, si es necesario, acota.

Tras exponer su tema, respondió a cuestionamientos y, respecto a buscar una eventual candidatura y a los recursos que se requieren, respondió que “yo creo en las convicciones; yo no creo en las conveniencias; fui candidato a presidente municipal en 2002siendo el más precario de todos los aspirantes, el más débil económicamente y logré, afortunadamente, la simpatía, la confianza del pueblo acapulqueño, y pese a todas las resistencias del dinero y el capital de los adversarios, el pueblo de Acapulco me eligió”.

En efecto, el entrevistado venció en 2002 al candidato con más respaldo político, Ernesto Rodríguez Escalona (PRI), así como a los otros dos empresarios y no menos adinerados, Luis Walton Aburto (Convergencia), y Alberto Mojica, (PT).

“Yo no me guío por el dinero, yo me guío por el sentido social, y quienes crean que el dinero es la vida, están envueltos en su vanidad”, dijo tajante.

-En caso de que decidas buscar la candidatura por Morena, en este partido hay al menos tres personajes visibles que buscarían lo mismo: Pablo Amílcar Sandoval, Félix Salgado y Nestora Salgado, y finalmente habría que buscar la unidad para que sólo uno vaya con posibilidades de ganar, ¿cómo sería esto posible?, -le preguntó este reportero.

-Yo ahorita no me preocuparía de los personajes que mencionaste, que merecen mis respetos, y si fuera así como dices, que van a participar, pues bienvenidos, no tengo ningún inconveniente con quienes quieran participar; esto es como las llamadas a misa: va el que quiere; yo en este momento me estoy ocupando de tener un pulso para mi potencialidad eventual, y de eso me ocupo, de lo demás no tengo ninguna inquietud, soy el responsable de mis actitudes, de mis decisiones, y si han de venir ellos y otros más, bienvenidos, yo lo que pretendo es pulsar mi potencialidad para ser un digno competidor en el caso de que se den las cosas.

EL PRD SE DESCARRILÓ

Gil Rivera le cuestionó sobre su militancia anterior en el PRD y a la posibilidad de que ahora milite en Morena.

-¿Cuál es la diferencia entre estar allá y ahora acá?

-La diferencia es la congruencia para estar en cualquier partido, y esa es una de mis fortalezas. Nadie está obligado a seguir una línea cuando se dobla la esquina, y lamentablemente el PRD dobló la esquina y no está uno obligado a apoyar lo indefendible.

Dijo que con la firma del Pacto por México lamentablemente se marcó el destino del PRD y, “obviamente a mi juicio, se apartó de los principios fundamentales que dieron lugar a este partido de izquierda que, para su conformación, costó vidas, persecuciones, represiones; en  2013 se desvían de este propósito”.

Si lo anterior no fuera suficiente prueba de la descomposición del partido del Sol Azteca, agregó, ocurrió algo peor todavía, y es “en 2018 que hace alianza con el PAN, un partido adversario por naturaleza”.

López Rosas no se asume como político, mucho menos como gente de partido, y dice que tiene claro que la política “tiene un lado de rudeza innecesaria, tiene un lado de depredación”, y que se requiere de “carácter, firmeza y decisión para afrontar los retos que se puedan presentar”.

Respecto al problema de paro laboral enfrentado esta semana por el Ayuntamiento porteño, el también ex diputado federal respondió que “cada quien asume las propias circunstancias de su gobierno; yo asumí las mías, Adela Román está asumiendo las que le corresponden, y me da mucho gusto que este paro haya concluido a través del diálogo, y para mí sí merece un reconocimiento que la presidenta haya contribuido a resolver este conflicto sin violencia, sin represión”.

LAS FOTOS CON AMLO

En su oportunidad, Verónica Castrejón le expuso que muchos políticos ya se andan tomando la foto con Andrés Manuel López Obrador para dar la idea de que tienen su apoyo, y le preguntó sobre su relación con el Presidente.

“No sé con quien se haya retratado AMLO en esos años que buscó la Presidencia de la República; nunca estuvo cercano a ningún hombre poderoso; él labró su propio proyecto, su propio destino, sin tener que acurrucarse en algún personaje”.

Dijo que eso de tomarse fotos para intentar tomar la delantera “son rémoras del pasado, de quienes no creen en la Cuarta Transformación, y yo sí creo en la Cuarta Transformación y ésta habla del respeto a la decisión popular; AMLO confió en la sociedad y no en los poderosos para llegar, y me parece que es una lección que tenemos que aprender, por eso yo le tengo un respeto absoluto a López obrador; durante los 18 años de su esfuerzo estuvimos apoyándolo modestamente porque creo en su proyecto de nación”, dijo.

“Lo único que esperaría de AMLO no es que me palomeara, eso sería volver al pasado, sino espero que confíe en mi proyecto, que no me vetara; tiene más de 30 millones de votos que le da derecho, no a elegir, pero sí a vetar en el sentido práctico y objetivo, y yo no creo que merezca ser vetado por la congruencia que he mostrado a sus principios”, concluyó.