Desaparecen 17 comerciantes en Chilapa; no hay pistas de su paradero

* Familiares protestan; no les informan la autoridad sobre sus pesquisas

* Los vendedores viajaban de Chilpancingo hacia el municipio que se ubica a 54 kilómetros de la capital y sin motivo aparente, se desconoce su paradero

* La FGE informó que realizaba la búsqueda con drones, aunque hasta el momento no ha habido resultados

Rafael Solano

La noticia trascendió el último lunes de octubre: al menos 10 integrantes de una familia originaria de la comunidad de Chautipan, ubicado en la zona serrana de Chilpancingo, desaparecieron, ya no se supo de ellos, luego de acudir a vender a una comunidad del municipio de Chilapa que colinda con el municipio de Quechultenango.

De hecho, fueron dos desapariciones, dos momentos en que amigos y consanguíneos perdieron todo contacto con un total de 17 personas dedicadas al comercio trashumante de enseres de cocina.

La primera desaparición ocurrió el martes 22 de octubre, luego que Alfonso Francisco Cabrera, de 35 años, José Enrique de los mismos apellidos, de 26 años, y Mario Francisco Millán, de 49, acompañados de Diego Alfonso Francisco Sacristán, de 16 años; Leandro Geovanni de los mismos apellidos, de 14 años, y Raymundo Santos Francisco, de 13, salieron de Chautipan hacia El Epazote, comunidad de Chilapa.

El sábado 26, dos mujeres que son madres de los menores de edad, acompañados de dos lugareños, salieron de Chautipan hacía El Epazote para tratar de localizar a sus familiares, pero también desaparecieron. Se trata de Flor Itulia Cabrera Sánchez, de 53 años y Clara Francisco Cabrera, de 30, así como de Héctor Santos de la Cruz 32 años. Se desconocía la identidad de un segundo acompañante de las mujeres.

La noche del lunes 28, la Fiscalía General del Estado (FGE) dio a conocer que investiga el delito de desaparición cometida por particulares en agravio de diez personas en la región Centro y que ha implementado acciones de búsqueda. En el boletín no precisa el nombre de las víctimas, lugar ni contexto de desaparición, aunque alude a que las mujeres fueron vistas por última vez el domingo 27 de octubre en la comunidad de Tlanicuilulco, municipio de Quechultenango.

Sin embargo, en diversos sitios web de noticias locales, comenzaron a circular fotografías de los comerciantes desaparecidos por los que la FGE emitió fichas de búsqueda, en donde se anota que son los integrantes de una familia además de un amigo.

La FGE difundió un boletín de prensa en el que asegura que desde el momento en que se recibió la denuncia ante el Ministerio Público correspondiente, se activó el Protocolo Homologado de Investigación para la Búsqueda de Personas Desaparecidas emitiendo las fichas de búsqueda e implementando las acciones para lograr la pronta localización. A través de la Fiscalía Especializada en Materia de Desaparición Forzada y Búsqueda de Personas Desaparecidas se inició una carpeta de investigación por el delito de desaparición cometida por particulares.

Pero entre la noche del lunes 28 que se difundieron las primeras fichas y la noche del martes 29 que trascendió la noticia por su impacto, la FGE y la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas habrían presentado los casos de desaparición como si se tratasen de hechos aislados.

El viernes primero de noviembre, amigos y familiares de los comerciantes desaparecidos se trasladaron de la comunidad serrana de donde son originarios a Chilpancingo, a la sede de la FGE a realizar una protesta porque no les informan acerca de la búsqueda.

Actualizaron ahí el dato de las personas que no saben de ellas: no son diez sino 17 e ignoran la posible causa de la desaparición masiva., lo que ha provocado temor entre los lugareños.

María del Socorro Barrera Millán relató a reporteros que entre los desaparecidos están cuatro de sus hermanos, quienes salieron el lunes 21 de octubre de Chautipan, pasaron a cargar mercancía en Chilpancingo y por la noche le avisaron que ya estaban en El Epazote. Su hermano Ángel, con quien tenía comunicación, le dijo que otros seis familiares llegarían el martes 22 también a vender; por la tarde cuando regresaran se comunicaría de nuevo. Pero no regresaron y las madres de los tres menores de edad, fueron a buscarlos con dos amigos y tampoco regresaron.

El domingo 27, cinco días después de no tener noticias de ninguno de los 10 desaparecidos, siete personas más acudieron a esa comunidad para buscarlos, entre ellos las esposas de dos jóvenes, de quienes tampoco volvieron a tener noticias.

La lista definitiva de desaparecidos son Ángel Castro Barrera, Javier Barrera Millán, Inés Morales Lorenzo, Marco Antonio Barrera Millán, Pedro Ismael Barrera Millán, Abraham Reyes Cayetano, José Enrique Francisco Cabrera, Mario Francisco Millán, Héctor Santos Cruz, Joel Morales Tolentino, Jaime Cayetano Tolentino, Alfonso Francisco Cabrera, Flor Itulia Cabrera Sánchez y Clara Francisco Cabrera, así como los menores de edad Raymundo Santos Francisco, Leandro Francisco Sacristán y Diego Alonso Francisco Sacristán.

Poco antes que se suscitara la protesta de los familiares y amigos de los comerciantes desaparecidos, la capital despertó con la notica del hallazgo de tres cuerpos desmembrados que fueron dejados en una camioneta de servicio mixto de pasajeros en el bulevar René Juárez Cisneros durante la madrugada. Hasta donde trascendió en redes sociales el conductor de la camioneta era buscado por familiares, quienes informaron que fue contratado para hacer un traslado al vecino municipio de Quechultenango.

Alrededor de las 3 de la mañana, al número de emergencia 911 de manera anónima se reportó un vehículo abandonado con bolsas negras cerca de un establecimiento comercial de venta de pollos asados y la delegación de la Fiscalía General de la República; al acudir, peritos de la FGE descubrieron que en el interior había tres cuerpos desmembrados.

“Una vez que el agente del Ministerio Público de la Fiscalía tuvo conocimiento de los hechos, inició la carpeta correspondiente. Personal de la Policía Investigadora Ministerial (PIM) y peritos de esta Fiscalía fueron desplegados como parte de las diligencias para esclarecer el ilícito”, agrega el comunicado correspondiente de la FGE.

Aunque sin aparente relación, la misma FGE dio a conocer con anterioridad que buscaba a los integrantes de una familia de una comunidad de Chilpancingo que desaparecieron en dos grupos después de ir a vender a Chilapa. La búsqueda era con drones.

Perderse en el camino

Es una coincidencia que resalta: a mediados a mediados de enero de 2020, un grupo de músicos fue reportado como desaparecidos en los límites de Chilapa y Quechultenango; fueron encontrados asesinados cerca de la comunidad de Mexcalcingo, perteneciente al primero de los municipios mencionados, el viernes 18.

El 23 de enero de hace cuatro años, 19 niños de comunidades indígenas del municipio de Chilapa de Álvarez anunciaron el levantamiento en armas contra los delincuentes, integrándose a las filas de la Policía Comunitaria de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias de los Pueblos Fundadores (CRAC-PF) en la comunidad de Alcozacán, de donde era la mayoría de músicos.

Los motivó quedar huérfanos, porque eran hijos de10 músicos indígenas asesinados cinco días antes, acción criminal atribuida al grupo delictivo de Los Ardillos que predomina en la región Centro y zona circunvecina.

Los niños que anunciaron ser parte de la Policía Comunitaria tenían entre ocho y 14 años participaron en un evento en el que fueron presentados como miembros de esa organización comunitaria ante la mayor parte de los habitantes de Alcozacán. En el mitin posterior, miembros de la CRAC reclamaron al todavía presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, por el abandono en que tiene a los pueblos de la zona colindante entre Chilapa, José Joaquín de Herrera (Hueycantenango)y Quechultenango, donde llevan mucho tiempo sometidos por Los Ardillos.

A pesar de la trascendencia de la noticia de los niños integrados a la Policía Comunitaria, ya no se supo si participaron alguna ocasión en la vigilancia de las comunidades y el combate a los delincuentes.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *