Fertilizante: Fracaso y corrupción

Total fracaso ha sido la entrega del fertilizante en Guerrero, por parte de los encargados del gobierno federal: Pablo Amílcar Sandoval (delegado único) y el Coordinador Jorge Gage, quienes presuntamente incurren en actos de corrupción mediante la compra del insumo a la empresa Agrogen que a su vez adquirió el abono de Corea del Sur, de pésima calidad.

Ya existen denuncias sobre el fertilizante “patito” adquirido en Corea, por la empresa Agrogen con la complicidad del delegado Sandoval Ballesteros y el Coordinador del Fertilizante Gage, de acuerdo a declaraciones del presidente del Colegio de Agrónomos en Guerrero, Antonio Colín Ramírez y el líder campesino, Evencio Romero.

Se presume, de entrada, tanto Amílcar como Gage estarían recibiendo un “moche” de 60 millones de pesos; el fraude con la compra del fertilizante al país asiático sería mayor, por lo cual se exige una investigación y se revise la licitación que obtuvo Agrogen, donde puede estar inmiscuido el Secretario de Agricultura, Víctor Villalobos.

Un rotundo fracaso ha sido la entrega del fertilizante; tendrá consecuencias desastrosas para la entidad, pero esto no lo quieren reconocer funcionarios –fifís- del gobierno federal que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien ya no sabe cómo evadir el tema en sus conferencias mañaneras. El escándalo por el fertilizante será de pronóstico y estallará más tarde que nunca.

El fracaso en la entrega del abono por parte del trío de funcionarios del gabinete morenista, hace crisis en Guerrero y el saldo es funesto: Bloqueos a carreteras, toma de bodegas, accidentes vehiculares con saldos de heridos graves, daños a la economía, decenas de miles de pesos en daños materiales, entre otros.

Miles de campesinos aún no reciben el fertilizante mientras los cultivos de maíz se ven mermados (milpas no crecen, se ven amarillentas por falta de abono). El gobierno federal no aportó el seguro contra lluvias y siniestros, lamentó el gobernador Héctor Astudillo Flores.

Quizás, los funcionarios federales aplican una siniestra estrategia cuyo fin es provocar no sólo estragos en el campo guerrerense sino hambruna entre miles de campesinos. Hasta el pasado año el padrón de beneficiarios era de 328 mil campesinos.

Casi cien mil agricultores podrían quedar sin recibir abono, de acuerdo a versiones de dirigentes campesinos como Evencio Romero y Antonio Colín, quienes han sido amenazados por los funcionarios –fifís- de que serán citados por la FGR, para que “comprueben lo que declararon”. Miles de campesinos respaldan a sus líderes.

A pesar del fracaso en que incurrieron los funcionarios federales como Pablo Amílcar Sandoval, éste ha ordenado a sus diputados lacayos, que salgan a defender el programa del fertilizante y al presidente AMLO, pero tal defensa ha sido inútil y burda.

En estado etílico (existe grabación en la estación Radio Capital, en el noticiero que dirige Federico Sariñana), la diputada por Morena, Norma Otilia Hernández, declaró una serie de incoherencias; dijo -por ejemplo- que el pasado año el gobierno gastó: ¡200 mil millones de pesos! y que, quienes exigen el insumo “no son campesinos”; también que, “los campesinos ni siquiera necesitan el fertilizante”. Por esa razón, la diputada es calificada como “Lady Mezcales”.

El próximo año habrá elecciones intermedias en Guerrero; si se presentan casos de hambruna, tal situación podría ser aprovechada por el gobierno morenista para repartir despensas y maíz amarillo

africano a familias que necesiten, con tintes electoreros y clientelares, para reposicionar al partido Morena de AMLO y a los lacayos de éste, como es el caso de Pablo Amílcar, quien como delegado único es un fiasco; lo demostró con el fracaso en la entrega del abono.

 

Capos de la Política

NO gestionan nada, NO evitan los graves conflictos, NO participan en reuniones para desactivar focos rojos; NO sirven para la gobernabilidad en Guerrero… ¿A quiénes nos referimos?… Respuesta: A la fracción parlamentaria de diputados locales del partido Morena en el Congreso de Guerrero, quienes no tienen compromiso social, sólo con sus intereses políticos y personales. No más.

Si de veras se aplicara un código de ética profesional a los 46 legisladores que integran la LXII Legislatura de Guerrero, la mayoría de los 23 diputados del partido Morena saldrían más raspados que el resto de sus colegas.

Varios de los diputados de Morena son verdaderos pillos de siete suelas; lobos con piel de oveja. También se disfrazan de Caperucita Roja. Hay muchos bandidos dentro de las filas de Morena, partido que bien utilizan para sus fechorías. Veamos:

-Arturo Martínez Núñez: Diputado local que representa al Distrito 10 con cabecera en Tecpan de Galeana, por el partido Morena. Militante del PRD, de manera cínica

y oportunista se montó en la ola de AMLO para ganar ese distrito, sin ser oriundo de tal demarcación; hasta lo demandaron en el INE. Su origen es el ex Distrito Federal. Martínez Núñez, está involucrado en un grave conflicto y escándalo judicial, porque el abusivo y prepotente legislador pretende quedarse con un enorme terreno en Punta Diamante en Acapulco, de gran plusvalía valuado en millones de dólares. Existen dos expedientes penal y civil, pero las autoridades no han actuado porque el júnior, hijo de dos políticos del PRD -Arturo Martínez Nateras y María de la Luz Núñez Ramos-, han movido influencias a alto nivel para que su pillo vástago no resulte afectado ni se le quite el fuero constitucional, a pesar de ser delincuente de cuello blanco.

-Alfredo Sánchez Esquivel: Es diputado que representa al Distrito14 de Ayutla de los Libres (Costa Chica). También era perredista, pero se montó en la ola de AMLO, “ganó la elección”. No les gestiona ni un bulto de fertilizante a los campesinos. Simula como representante popular. Fue humillado y ninguneado por el delegado fifí federal único -Pablo Amílcar- cuando hace más de medio año fue aprobado el presupuesto de Guerrero. Alfredo, sólo cobra jugosa dieta en el Congreso. Y lo que es peor: Este individuo, NO paga impuesto predial a la comuna de Ayutla que le requiere más de un millón de pesos, por evasor

fiscal. Sánchez Esquivel, ni de chiste se para por el Distrito que dice representar, para que las autoridades municipales NO le cobren el impuesto predial de su latifundio; o sea terrenos que son cientos de hectáreas. Alfredo, dice que no pagará el IP mientras AMLO sea presidente; o sea en los próximos casi cinco años. ¿Estará enterado cabecita de algodón, de las trapacerías del diputado Sánchez Esquivel?

-Nilsan Hilario Mendoza: Diputada por el Distrito XVI de Ometepec, región de la Costa Chica. Durante muchos años como propietaria de una farmacia, le vendía medicamentos a la Secretaría de Salud, lo cual la convirtió en una próspera y potentada empresaria millonaria. De manera astuta de montó en la ola de AMLO y logró convertirse en legisladora; ahora se siente más poderosa que el ex gobernador Ángel Aguirre Rivero, a quien todo el tiempo y con repudio lo llama “cacique costachiquense”. Como el actual gobierno estatal priista ya no le compra medicamentos a la ambiciosa comerciante y legisladora, con toda su furia se lanzó en ataques en contra de la Secretaría de Salud a través de un diario de Acapulco. De lo peor calificó al titular de Salud en Guerrero, Carlos de la Peña Pintos, porque éste ya no le compra medicamentos. El negocio de medicinas es bueno para la influyente y voraz diputada Nilsan Hilario Mendoza, quien aspira se alcaldesa de Ometepec; se siente en los cuernos de la luna.

-Moisés Reyes Sandoval: Representa al Distrito VII de Acapulco. Es primo hermano del delegado fifí federal único, Pablo Amílcar Sandoval. Impulsa una ley para que celebren matrimonio legal y civil hombres con hombres y mujeres con mujeres. La Iglesia Católica, mayoritaria al resto de religiones y sectas, repudia a este legislador, muy proclive a los gays. Como representante de un distrito de Acapulco, NO gestiona ninguna obra positiva para el puerto, mucho menos hace algo para abatir la violencia allá.

Moisés, es de los diputados que en el Congreso cobra estratosférico sueldo, superior al resto de sus “camaradas”. Trasciende que recibe un bono mensual de cientos de miles de pesos para actividades políticas que emprende en Acapulco donde aspira ser, primero, candidato de Morena, y luego alcalde, con el visto bueno de su primo-hermano Pablo Amílcar.

Éste último, sigue manejando al Congreso de Guerrero, y como su títere al que se dice “presidente de la Junta de Gobierno”, Antonio Helguera Jiménez. Triste e indigno el papel que desempeña Toño… La mayoría de los 23 diputados locales del partido Morena, ya se sienten capos de la política. Lástima… Punto. salomong11@yahoo.com.mx

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