Edgar Elías Azar imagen y semejanza de José Francisco Ruiz Massieu

Edgar Elías Azar, hijo de libanes y madre mexicana, nacido en Acapulco, Guerrero en el ambiente de centro del puerto, su padre logro el sustento de sus hijos en el comercio de la ropa en las carencias propias de esa época.
Edgar Elías Azar concedió en la facultad de derecho de la UNAM con José Francisco Ruiz Massieu, ese es el origen de la cercanía, es a este que le debe sus cargos públicos desde La Secretaria de Salud donde Ruiz Massieu fue subsecretario e hizo a Edgar Elías Oficial Mayor.

Es nombrado Secretario de Finanzas en el periodo en que su tutor es gobernador del estado de Guerrero, hombre de las confianzas del gobernador le corresponde a ser el operativo en la captación de terrenos bajo el “cumplimiento” de la ley para adquirir los terrenos de Punta Diamante con los que se le pagara el “favor” a Diego Fernández de Ceballos por apoyar “la caída del sistema” en la fraudulenta elección del 1988.

Con la poca experiencia de la aplicación de la ley como “Juez del pueblo” como él lo dice en el Estado de México, aun como estudiante de la facultad de tercer año de su carrera, pero el resto de su vida se especializara en aplicar la ley para su provecho personal y de grupo.

Consumando la “orden” superior que tomar los terrenos de Punta Diamante para pago de favores políticos de Carlos Salinas de Gortari y redimir el fraude electoral, aprovecha para iniciar su acrecentada adquisición de inmuebles y riqueza.

Lo inicio José Francisco Ruiz Massieu en la simulación de la democracia, Ruiz Massieu perdió las elecciones en el 1988, y no acepto el resultado de las presidencias municipales que fue derrotado, persigue, encarcelo, desterró y enterró a los que se opusieron a su fraude electoral e impuso a su súbditos en las presidencia que perdió.

En esa tesitura su alumno Elías Azar, llego a la presidencia del Tribunal Superior de Justicia de la CDMX para quedarse por diez años, reelegirse por tres ocasiones, modificar el artículo 33 de La Ley a su beneficio en dos ocasiones, la primera para poder relegirse, la segunda para no jubilarse a los 70 años como lo indica dicho artículo y cambiarlo a la edad de 75años la jubilación.

Como su “Ídolo” finado persiguió, investigo, hostigo a los magistrados que se oponían a la reelección, el “Porfirio Díaz” del poder judicial de la CDMX justificaba su “dictadura” judicial con el argumento de que solo EL podía realizar los cambios que la actual sociedad necesitaba.

“El discípulo amado” del “visionario” gobernador sacrificado, es señalado por su creciente corrupción, En los Estados Unidos le indican su parcialidad de la ejecución de sentencias por supuestamente permitir sobornos a jueces del TSJ a cambio de fallos favorables (http://bit.ly/2mVwISt); perdió 120 millones de pesos del erario por invertir en Ficrea, a pesar de que la institución financiera que lo asesoraba le dijo que era mala inversión (http://bit.ly/2o9EDwD); semanas después de oponerse a su segunda reelección, una magistrada fue investigada penalmente (http://eluni.mx/29sxPoO); hizo negocios inmobiliarios poco éticos y transparentes.

Por ejemplo, invirtió el Fondo de Retiro de los magistrados en comprar un estacionamiento público que los propios empleados del Tribunal pagan por utilizar cuando trabajan (http://bit.ly/1wEcpMO).

El “Magistrado profiriato”, también dejo evidencias de su sangre polígama, libanes-guerrerense, en su expediente abierto existen señalamiento de hostigamientos sexuales La abogada penalista Ana Katiria Suárez acusó que en febrero de 2014 se encontró con Elías Azar y otro hombre en la oficina del entonces presidente del TSJDF y fue víctima de acoso sexual La penalista fue defensora de Yakiri Rubio, la joven acusada de asesinar a su violador, delito por el que pasó tres meses en prisión y enfrentó un juicio de un año.

La otra mujer que acusa a Elías Azar es una periodista mexicana que pidió el anonimato. Contó que en diciembre de 2016 acudió a una entrevista con el entonces funcionario capitalino, quien estaba acompañado de tres empleados del Tribunal.
Nada de raro el que en “la mañanera”, Santiago Nieto haya declarado que La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda denunció ante la Fiscalía General de la República (FGR) a Edgar Elías Azar, ex presidente del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México, por lavado de dinero y enriquecimiento ilícito.

“El Magistrado Dólares”, lo inicio el “intelectual dictador”, José Francisco Ruiz Massieu en la Secretaria de Finanzas, para torcer la ley, lavar dinero, para ser parte del sistema corrupto como lo son los de su grupo.

Sus innumerables inmuebles, propiedades, 78 millones de pesos que no cuadran con los años de servicios en la función pública y tampoco cuadran con las carencias de la niñez que vivian de una tienda de ropa. Llego el tiempo de rendir cuentas en la 4T y los que faltan, también les llegaran la hora.