El Halcón Peregrino: 2019, año uno en la era de AMLO

Martes 31 de diciembre… La Bahía de Acapulco, vista desde el puente de la ya famosa Garita de Juárez (famosa por aquello de “La Masacre de La Garita”, ocurrida en 27 de enero del 2006, con que se “estrenó” el Presidente Municipal Félix Salgado Macedonio, quien asumió el cargo unas semanas antes)… Al fondo, un destello del Faro de la Isla de La Roqueta…

Falta hora y media (10:29 de la noche) para que fenezca el agonizante año 2019… Primero de enero del 2020, 7:37 de la mañana… El grandioso Tonatiuh, dios azteca del sol, apareciendo por primera vez en el año, atrás del cerro de la colonia 20 de Noviembre…

Al fondo, la avenida escénica que sube de la glorieta de la Base Naval y conduce a la glorieta de Puerto Marqués… Ahora los años me transcurren más rápido… Aún no termino de olvidar la época del pan de muerto (vísperas del uno y dos de noviembre), cuando lo vuelvo a ver de nuevo… Igual me sucede con las flores de nochebuena…

Hace poco más de un año por ejemplo (en el 2018), al pasar por el tianguis de la Prolongación Durango, vi con sorpresa flores de nochebuena… “Pero si apenas estamos a mitad del año y falta mucho para noviembre y diciembre”, pensé con cierta sorna, reparando luego en mi error… La vida se escapa como agua entre las manos…

Y así con la rosca de reyes de cada 6 de enero, etcétera… Intento que mis reflexiones se ciñan al 2019 y no extenderme hasta mi infancia, como suele suceder… Hay tantas cosas escondidas en mi mente que intento recordar y destacar, pero se resisten a salir… Familiares, amigos, conocidos y personajes, que se nos adelantaron en el camino…

Los que aún viven y se encuentran cerca, pero como si también estuvieran lejos… Y mi perenne lucha por no traicionarme a mí mismo… Por seguir siendo yo y seguir haciendo lo que a mí tanto me gusta: Tratar de conocer la realidad natural y social tal cual en su forma, fondo y en sus procesos internos… Si no mediante la práctica social, cuando menos con su investigación documental y su observación…

Tratando de extender estas dos prácticas al resto de la sociedad, y contribuir así a la transformación y mejoramiento de sus condiciones de vida (que incluye la lucha contra la ignorancia y las supersticiones), cuando menos en su aspecto teórico… Hasta donde lo permite la lucha por la vida… y quienes se sienten con el derecho de imponer, física o moralmente, su visión, su actitud y sus prácticas (anti)sociales… Ahora bien, regresando a lo político-social, cabe señalar que los mexicanos comenzamos el 2019 con un nuevo Presidente…

El tabasqueño Andrés Manuel López Obrador… Un hombre terco que luchó en dos ocasiones para ser Presidente de México y se negó a renunciar a una tercera, venciendo al fin en primero de julio del 2018… Caía la tarde-noche de ese domingo en el Zócalo de Acapulco, y aún no podía creer que había(mos) ganado…

Llegó el Primero de diciembre… su protesta al cargo… la banda presidencial y acabé de convencerme… Después, la muy trágica explosión del ducto de Pemex en Tlahuelilpan, Hidalgo, ocurrida un 11 de enero del 2019… Luego, el “Culiacanazo” del 17 de octubre…

 Lo último, el golpe de estado perpetrado en 10 de noviembre en Bolivia, en contra del Presidente Evo Morales Ayma… Su rescate aéreo por parte de valientes miembros de la Fuerza Aérea Mexicana, al que varios gobiernos sudamericanos, opusieron obstáculos para que no se consumara… La expulsión de la embajadora de México en Bolivia… Y así sucesivamente…

El sin precedente aumento a los salarios mínimos generales, que rompe con el mito de sus consecuencias inflacionarias… La reducción de los altos sueldos de los funcionarios y demás servidores públicos, y la prohibición de que rebasen al sueldo presidencial… Lucha que aún sigue… Los viajes presidenciales en aeronaves comerciales… Todo ello, acorde con sus políticas públicas de austeridad, combate a la corrupción y mayor distribución del presupuesto público de egresos… Etcétera…

Por otro lado, ¿un producto interno bruto (PIB) de 18 billones 348 mil millones de pesos (a septiembre del 2019, dentro del primer año de gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador [2018-2024] y según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, Inegi), una deuda pública heredada en 2018 por el gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto, de 10 billones 551 mil 718 millones 600 mil pesos, e incrementada en 2019 ya por el Presidente López Obrador, a 10 billones 931 mil millones de pesos (un incremento de 379 mil 281 millones 400 mil pesos, que no necesariamente implica la adquisición de otros empréstitos, sino sólo cargos por la misma deuda y consecuencias de la inflación, paridad peso-dólar, etcétera), una paridad de 18.90 pesos por dólar esencialmente invariable y una tasa anual de inflación de 2.6 por ciento, según el Inegi a la primera quincena de diciembre del 2019, ó 3.4 por ciento, según el Banco Bilbao Vizcaya Argentaria, BBVA (en contraste con el PIB del 2013: 16 billones 82 mil 510 millones de pesos, la deuda pública heredada en 2012 por el gobierno del Presidente Felipe Calderón a su sucesor Enrique Peña Nieto, de 4 billones 533 mil 511 millones 620 mil pesos, e incrementada a 5 billones 305 mil 324 millones 620 mil pesos [un incremento de 771 mil 883 millones de pesos, que en el 2013, superó en 392 mil 601 millones 600 mil pesos -en un 50.86 por ciento aproximadamente- al incremento de la deuda pública en el primer año de gobierno de AMLO: 379 mil 281 millones 400 mil pesos en 2019], una paridad de 14.37 pesos por dólar esencialmente invariable y una tasa anual de inflación de 3.97 por ciento, según el BBVA), significan un retroceso, un estancamiento, o un avance y crecimiento económicos? Espero comprender aún más este fenómeno económico, a la brevedad posible…

Pero bueno, ya veremos qué nos depara este año que acaba de nacer, lo cual, en buena parte, está en manos de todos los mexicanos… En nadie más… ¡Gracias, 2019!… ¡Bienvenido, 2020!… Huitzilopochtli poderoso, en tus generosas manos me encomiendo… Salvo su mejor opinión, querido lector…