El Halcón Peregrino: El “Hoy no circula” en Acapulco, un debate ocioso

 

PIE DE FOTO: Entrada principal a la colonia Zapata y la Central de Abastos de Acapulco, un domingo tres de mayo, poco antes del mediodía. FOTO: JMRC

 

En días pasados, la alcaldesa de Acapulco, Adela Román Ocampo, dentro de la serie de medidas tendientes a evitar la propagación del coronavirus, decretó el programa “Hoy no circula» en Acapulco, vigente durante los primeros cinco días de la semana, en el cual los vehículos con placas de circulación con terminación 0 y 1 no podrán circular en los días lunes, y así consecutivamente, hasta los vehículos con placas con terminación 8 y 9, que no podrán hacerlo durante los días viernes, es decir, la prohibición para circular, es sólo para un día a la semana y de seis de la mañana a diez de la noche, ya que durante los sábados y domingos, no regirá tal prohibición…

Tal medida de la Presidenta Municipal de Acapulco, provocó una polémica hasta el interior del Cabildo Municipal, extendiéndose hasta en diversos personajes de la vida social y política del Puerto, incluyendo a connotados juristas, quienes se centraron en el aspecto de la legalidad o no de tal medida, más que en sus efectos sobre el combate a la propagación del coronavirus… Otros más, no dejaron pasar la oportunidad, para continuar con sus críticas hacia el quehacer gubernamental de la Alcaldesa…

Ahora bien, apegándonos a este asunto, este opinador opina, que la disyuntiva sobre si tal medida es legal o no, es «fundamentalmente» incorrecta, ya que el punto a debatir, es que, si tal medida contribuye o no, a impedir la propagación del coronavirus y, consecuentemente, a su extinción… Y preciso «fundamentalmente», porque hasta la misma Ley, contempla no sólo la posibilidad, sino la obligación de anteponer la preservación de los bienes tutelados por la misma, sin tener que cumplir «previa» o «correctamente», pero bajo responsabilidad, con determinadas formalidades legales, para la realización de actos de autoridad, en tratándose de casos urgentes, como lo es el actual combate a la pandemia del coronavirus, que ya ha causado millones de enfermos y cientos de miles de muertos en casi todo el mundo… Formalidades legales que pueden satisfacerse, corregirse o subsanarse posteriormente, dentro de los plazos establecidos por la misma Ley…

Así pues, el punto a debatir, no es tanto de carácter instrumental (la legalidad o ilegalidad del acto), sino de carácter sustantivo, real: la defensa de la salud y las vidas de la población acapulqueña y de sus visitantes, en contra del coronavirus… Y menos aún, si tal debate «legalista», también es utilizado para tratar de menoscabar, la autoridad de la Presidenta Municipal de Acapulco… ¿O no, mis venerables y Sumos Sacerdotes del Derecho?…

Salvo su mejor opinión, querido lector…

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *