Alguien miente en Sectur

* Critican estadísticas oficiales de visitantes extranjeros en 2022

* Las cifras de la dependencia  no resisten un cuestionamiento básico, plantea Francisco Madrid Flores

* Todas las instancias de gobierno falsean los datos; la solución es observatorio ciudadano, dice José Cedano de Coltur

El lunes 14 de agosto de este año, en el diario El Universal, el doctor Francisco Madrid Flores, especialista en temas turísticos, publicó un breve ensayo que, a pesar de su brevedad, arroja una espesa sombra de duda sobre la probidad y la eficiencia en la Secretaría de Turismo de Guerrero, en particular en lo que se refiere al manejo de datos estadísticos.

En su ensayo, explica que, a contrapelo de la tendencia menguante del flujo turístico extranjero al puerto —derivada del envejecimiento del destino, del impulso al turismo residencial y de la percepción de inseguridad pública—, los datos que muestra el sistema informático Datatur, de la Sectur federal, indican que ese elemento va en crecimiento, en particular en el 2022, cuando reportó un crecimiento de 283.6 por ciento, es decir que casi se cuadruplicó al pasar de 110 mil a 422 mil turistas. Sólo en el 2022.

“¿Qué habría pasado para que en un periodo tan corto y todavía con efectos de la pandemia se cuadriplicara el flujo turístico? ¿Qué habrán hecho los responsables del turismo en Guerrero para lograrlo? ¿Resistirán las cifras un cuestionamiento básico? La respuesta es no”, escribe.

Y no es cualquier analista quien hace ese señalamiento, pues Francisco Madrid Flores posee un extenso currículum, en el que, por sólo mencionar algunas de las múltiples responsabilidades que ha desempeñado, destaca que laboró a lo largo de 23 años en la Secretaria de Turismo de México en diversas posiciones, entre las que destacan las de director de Capacitación Turística, director de Promoción Nacional, director general de Turismo Interno, director general de Desarrollo de Productos Turísticos, director general de Política Turística, subsecretario de Política Promocional, subsecretario de Planeación y subsecretario de Operación.

En su escrito explica que, según la información que se puede consultar en el sistema estadístico Datatur de la Secretaría de Turismo federal, el promedio del periodo 2010-2019 de llegadas de turistas no residentes en el país a Acapulco fue de un poco más de 110 mil cada año.

Acota que esa cifra “es más o menos lo que yo tenía en mente” y precisa: “debo hacer un paréntesis para decir que Datatur es alimentado por información de las autoridades estatales de turismo. Es decir, la Secretaría de Turismo (federal) realiza la función de compilación de esa información”.

En sus palabras: “Mi sorpresa fue mayúscula cuando identifiqué que el dato había subido a ¡un poco más de 422 mil turistas en 2022!”.

Luego cita el reporte de la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación, según el cual “el volumen de llegadas de turistas residentes en el extranjero vía aérea al aeropuerto de Acapulco en ese periodo apenas superó 15 mil. Esta cifra es menor, pero más o menos consistente con los poco más de 65 mil pasajeros internacionales que se reportaron en el mismo año en dicho aeropuerto, de acuerdo con información de la Agencia Federal de Aeronáutica Civil, recordando que un turista suele ser equivalente a dos veces pasajero (una vez a la entrada y otra al salir)”.

Luego admite “la posibilidad de que lleguen pasajeros en vuelos de conexión por la debilidad de la conectividad internacional del destino. Sin embargo, utilizando una herramienta de análisis de tráfico de viajeros, encuentro que en dicho año sólo se vendieron 10 mil 397 boletos en EU y Canadá (mercados que explican más de 80 por ciento de todos los turistas internacionales al país) con destino a Acapulco”.

En síntesis, no hubo manera de hacer concordar estas cifras con las de Datatur.

Comenta que, “para verificar, traté de consultar la página de internet de la Secretaría de Turismo del estado y no encontré las estadísticas en un raquítico sitio web”.

Para Francisco Madrid, “salvo alguna información extraordinaria”, sólo hay “dos explicaciones para lo que parecen datos desproporcionalmente inflados: un error humano en la cancha del gobierno estatal o del gobierno federal (en honor a la verdad, esto último parece poco probable), lo que por la sensibilidad en el uso de la información es entendible, pero inadmisible; o (…) nos están tratando de colar un cuento tan grande como bella es la bahía de Acapulco, y tengo la certeza de que esta es una de las más hermosas de todo el mundo”.

La opinión del Coltur

En opinión del presidente del Colegio de Licenciados en Turismo de Guerrero, José Cedano Galera —consultado al respecto por este semanario—, Francisco Madrid tiene razón en sus señalamientos y dudas, pero no en afirmar que los datos que maneja el sistema Datatur son proporcionados sólo por las dependencias encargadas del turismo en los estados. “Ellos hacen sus propias investigaciones”, no en todos los destinos turísticos del país, sino sólo en los más importantes, y Acapulco es uno de ellos, asegura.

Así, para él, la única conclusión posible es que ambas instancias falsean de manera deliberada la información que presentan.

En lo que toca a Guerrero, Cedano Galera ve “falta de capacidad y de probidad de autoridades municipales y estatales”, que sólo manejan tres datos: ocupación, afluencia y derrama. “No podemos tener datos tan raquíticos. En Cancún manejan 20 datos”, señala.

Sectur Guerrero, sin versión

La Sectur Guerrero no ha dado una explicación al señalamiento de Francisco Madrid, y no sería creíble una versión que asegurara que el titular de la dependencia, Santos Ramírez Cuevas, no ha leído su ensayo. Así que la pelota sigue en la cancha del funcionario.

Este reportero preguntó a la vocera de la dependencia, Olivia Arredondo, por el sitio web en que la Sectur estatal aloja los datos estadísticos de ocupación hotelera, afluencia turística, derrama económica, lugares de procedencia de los visitantes y otros igual de relevantes.

Su respuesta fue que el primero de esos datos, es decir la ocupación hotelera, lo proporciona de manera consuetudinaria la Dirección de Comunicación Social del gobierno del estado a sus abonados, es decir a los medios de prensa que tienen convenio publicitario con el Ejecutivo estatal, y que la obtención de los otros había que tratarla con el subdirector de esa oficina, David Armenta.

En otras palabras, esa información no está disponible para el público de manera directa, como para tener acceso a ella desde una computadora cualquiera con Internet. Y todavía habría que indagar dónde aloja la dependencia sus estadísticas.

Un observatorio ciudadano turístico

¿Acaso hubo un falseo deliberado de datos para dar la impresión de que la dependencia trabaja con intensidad para traer turistas extranjeros a Acapulco? ¿Acaso ese esfuerzo ha rendido tan espléndidos frutos como para casi cuadruplicar la afluencia?

Para José Cedano, un observatorio ciudadano turístico sería un gran avance en materia de transparencia gubernamental, un organismo con presencia preponderante de la academia y la iniciativa privada, que no deje sólo manos del gobierno el manejo de los datos. Un organismo como los que el gobierno federal actual se niega a financiar, con el argumento de que implican un gran e innecesario gasto de recursos públicos.

La propuesta de tal organismo, financiado por la Universidad Autónoma de Guerrero, “ya está en el escritorio del secretario del ramo”, precisa el presidente del Colegio de Licenciados en Turismo. Pero el funcionario no ha dado su visto bueno. Y no hay para cuándo.

“No podemos seguir a ciegas”, concluye Cedano Galera.

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