En Iguala, frenón a los normalistas

 * Se quedan sin mitin en Iguala y los dispersan con gas lacrimógeno

 * Tras repelar a los jóvenes y a familiares de desaparecidos, militares tienen respaldo presidencial

Desde hace un año, la segunda investigación del caso, hecha por encargo de la administración de Andrés Manuel López Obrador y que fue dada a conocer por el subsecretario de Gobernación Alejandro Encinas, concluyó que no hay indicios de vida delos normalistas de Ayotzinapa reportados como desaparecidos el 26 de septiembre de 20214; sin embargo, como desde el mismo gobierno federal se les dice que sigue la búsqueda, los familiares y normalistas en activo insisten en movilizarse para que se esclarezca el hecho sangriento. 

Pero hay respaldo presidencial a los militares; el espaldarazo dado varias veces en lo que va del sexenio les dio confianza, empoderamiento y eso les hace mostrar poca tolerancia con los normalistas, a diferencia de años anteriores que hasta se ponía la otra mejilla; esta ocasión, ni siquiera dejaron que realizaran un mitin afuera del cuartel de Iguala el lunes 18 y los dispersaron con gas lacrimógeno; tres días después, el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, se lanzó contra los “seudo defensores de derechos humanos” que usan “este lamentable asunto para afectar” a su gobierno y al Ejército.

El lunes 18, cuando los padres y madres de los 43 normalistas desaparecidos pretendían realizar un mitin frente al 27 Batallón de Infantería con sede en Iguala, fueron repelidos con gas lacrimógeno.

Iniciaba el mitin y el abogado del Centro de Derechos Humanos de la Montaña «Tlachinollan», Isidoro Vicario Aguilar, había tomado la palabra cuando estalló la primera granada de gas casi a los pies de los padres y madres.

Los familiares y normalistas que los acompañaban optaron por suspender el mitin. La intención era nuevamente exigir al gobierno federal que investigue la posible participación de militares en la desaparición de 43 normalistas el 26 de septiembre de 2014.

En respuesta, los normalistas lanzaron cohetones de fabricación casera contra el cuartel. También despojaron una camioneta a un chofer de una empresa, la cual aventaron contra la fachada y le prendieron fuego.

Después de unos 15 minutos de refriega, los normalistas se retiraron. En la víspera del festejo independentista, de la misma manera fueron repelidos del cuartel de la 35 Zona Militar de Chilpancingo.

La Defensa

El caso Ayotzinapa fue abordado varias ocasiones durante la semana transcurrida en la conferencia de prensa mañanera. El miércoles 20 respondió a la pregunta de su reunión con los padres de los 43 estudiantes de Ayotzinapa que tendría la tarde de ese día.

Dijo que la reunión era “para informarles, porque es muy importante que ellos tengan toda la información sobre lo que se está haciendo para encontrar a los jóvenes de Ayotzinapa, es un compromiso que hicimos, y desde luego castigar a los responsables”.

Agregó que ha sido un asunto “también manejado por los conservadores reaccionarios en contra nuestra y también para un grupo de seudodefensores de derechos humanos, aliados con organismos internacionales de derechos humanos, incluso de la ONU, de la OEA, que se han dedicado a medrar con el dolor de la gente, porque ellos viven muy bien, ganan muchísimo dinero, ganan en dólar, y tienen un pensamiento también muy conservador, muy reaccionario; entonces, están queriendo manchar la investigación que estamos haciendo”.

Siguió embistiendo: “Preguntaría yo a estos seudodefensores de derechos humanos, de la llamada sociedad civil o de las organizaciones no gubernamentales entre comillas, que me dijeran en dónde se tiene a tantos presos por un delito de desaparición como este, muy lamentable; en dónde hay dos generales presos, 20 oficiales del Ejército o soldados, un procurador de justicia y como 120 detenidos. ¿Dónde? ¿En qué país?”.

No es cierto, recalcó, que el Ejército no haya entregado toda la información del caso. A la pregunta si resolverá el caso de los normalistas desaparecidos antes de terminar su gobierno, respondió que “tenemos mucho avance”.

Y de los documentos clasificados que la Sedena no quiso entregar, algo que argumentó el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes de la OEA para retirarse, dijo: “Pues no fue cierto, el Ejército entregó todo lo que tenía”.

Ante la insistencia de reporteros, añadiría: “Es increíble el nivel de manipulación. Ayer, antier, hubo una manifestación en Chilpancingo en la zona militar, y un abogado de los padres dijo ahí que la responsabilidad era del Ejército y que no habían entregado información, todo esto que tú estás planteando, pero más todavía: de que no se había hecho nada. Entonces, por eso yo quiero hablar con los papás, para decirles. Yo he estado pendiente”.

El jueves 21 agregaría, tras la reunión con los familiares de los normalistas, que habría otra reunión el lunes 25 en la que “no voy a participar porque tengo otras actividades”, pero “se les va a dar respuesta a su pliego petitorio, que básicamente estriba en solicitar información de la Secretaría de la Defensa”.

Insistió en que se ha entregado toda la información, “pero los padres insisten en que falta información; entonces, estamos haciendo de nuevo un acopio, no de información, sino, a ver, qué nos piden, qué se ha entregado, qué falta, y si existe, para no seguir ahondando diferencias”.

Un reportero radial preguntó sobre lo dicho por Vidulfo Rosales Sierra, el abogado de los familiares, quien comentó que le entregaron algunos folios; ¿los folios que ellos tuvieron acceso son documentos que existen en la Sedena?

Responde el presidente de la república: “Es que ellos sostienen eso, pero la Defensa sostiene que ya entregó toda la información. Y lo que estoy planteando es que se haga, desde ayer, una revisión de todo para que no quede ninguna duda y se pueda decir: ‘Ya entregamos toda la información, eso es lo que se tenía’; o, en efecto, faltaba entregar otra información o ya no hay más. Pero resolver este asunto en definitiva porque si no, empieza la manipulación o se intensifica la manipulación. Y todo esto no es nada más un asunto social profundamente humanitario; es también, desgraciadamente, un asunto que utilizan nuestros adversarios para dañarnos o buscar dañarnos”.

Recalcó: “Entonces, tenemos que no dar pie. Primero, porque tenemos el compromiso de conocer la verdad y que haya justicia sin impunidad para nadie. Y, segundo, que no queremos que todos estos falsarios, seudodefensores de derechos humanos, estén utilizando este lamentable asunto para afectar al gobierno y en especial al Ejército. Que sí son responsables, como está sucediendo, que ya hay como 15, 20 militares encarcelados, dos generales, pues que sean juzgados y que se demuestre que fueron responsables, ya están en la cárcel, eso no lo habían hecho antes. Pero no se puede decir ‘es el Ejército’, que es una institución fundamental del Estado mexicano, cuando son elementos del Ejército que presuntamente participaron y son responsables de estos hechos”.

Aún más: “No fue, eso sí, un operativo que el Ejército encabezó, no, no fue de esa manera. Entonces, sí hay una participación, pero de qué tipo. Puede ser por omisión, el que tenían información y no actuaron para evitar que los miembros de la delincuencia organizada y autoridades locales secuestraran a los jóvenes”.

Molesto por la insistencia de reporteros, añadiría que “no somos iguales; por eso no pueden los simuladores con nosotros, los seudodefensores de derechos humanos o seudoambientalistas o supuestos miembros de la sociedad civil, de las organizaciones no gubernamentales. Todo esto que crearon durante el periodo neoliberal, neoporfirista, el periodo de corrupción y de saqueo”.

Contó que la investigación tuvo contratiempos. “Renunciaron ministerios públicos; terminó haciendo el trabajo de formulación de escritos para órdenes de aprehensión el fiscal general Gertz Manero. Ahí nos dimos cuenta de que había gente adentro que no quería que llegáramos a conocer la verdad. Todo eso lo hemos enfrentado y seguimos adelante”.

Todavía dijo a los familiares que “se han portado las autoridades militares, tanto el secretario de la Defensa como el secretario de Marina, a la altura de las circunstancias, han actuado con rectitud. Entonces, esa desconfianza no tiene fundamento (..) servidores públicos, militares, oficiales, mandos, todos están actuando con lealtad al pueblo, con lealtad a las instituciones; y los soldados, que siempre lo he dicho y lo voy a seguir diciendo, es pueblo uniformado”.

Concluyó: “Entonces, si nos quedamos con la idea que el Ejército es una institución para la represión, entonces pues no vamos a convencer con nada. Es como si yo quiero convencer a un fifí de que nos conviene a todos acabar con la corrupción, aunque yo utilice todos los argumentos y le presente todas las pruebas va a ser muy difícil. Ese pensamiento conservador es muy sectario, dogmático; para decirlo con más claridad, fanático”.

A los familiares de los 43 normalistas no les pareció lo dicho por el presidente de la república y fueron a instalar, la tarde de ese jueves, un plantón afuera del Campo Militar número 1 en la ciudad de México.

Ahí el vocero del comité de familiares, Melitón Ortega, señaló que el Ejército está mintiendo y que tiene en su poder documentación del Centro Regional de Fusión de Inteligencia (CRFI) que los militares tienen en Iguala y Chilpancingo.

En el plantón, los familiares de los 43 normalistas afirmaron que López Obrador está “protegiendo” al Ejército al decir que ya entregó toda la información que tiene. A través de un comunicado, señalan que “los padres le decimos que es mentira”.

En este sentido, las investigaciones realizadas por el gobierno de López Obrador “han sido insuficientes para saber que pasó y donde están los 43 estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa”.

El plantón persistía el fin de semana; los familiares de los desaparecidos y los normalistas tienen planeadas diversas manifestaciones públicas hasta el martes 26, día del noveno aniversario de la desaparición masiva.