Asume la Secretaría de la Defensa Nacional el mando del Tren Maya

* La posibilidad de progreso con justicia, significa este proyecto, señaló el Presidente

En lunes 4 de septiembre del 2023, asumió la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el mando de la empresa Tren Maya, a través de la cual operará, uno de los sexenales proyectos principales, que a las próximas generaciones se heredarán.

En la conferencia de prensa presidencial, el General de Brigada Intendente Diplomado del Estado Mayor, Óscar David Lozano Águila, jefe del Estado Mayor de la X Región Militar, con sede en Merida, Yucatan, fue designado director general de la empresa de participación estatal mayoritaria, lo cual coincidió con la renuncia de Javier May Rodríguez, responsable del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), que la construcción de la obra operó.

Por su parte, el presidente Andrés Manuel López Obrador, precisó que en la Secretaría de la Defensa Nacional quedará en custodia esta obra, porque como otras, se está financiando con inversión pública.

No es deuda ni esos mecanismos de asociación público-privada, es presupuesto público, dinero del pueblo el que se está invirtiendo, son obras de la nación, del pueblo. Queremos cuidarlas, que no vaya a suceder, lo que con dinero de todos los mexicanos los neoliberales corruptos hicieron, trasladándolas a particulares –señaló.

Explicó que ya hay un decreto de transferencia de la empresa, que involucra trenes, estaciones, cocheras, talleres, todo lo que el Tren Maya liberal es, en el cual –a diferencia de las tasas de crecimiento en el norte y centro del país– había crecimiento cero o decrecimiento –dijo López Obrador, quien precisó que excepto en Cancún, Quintana Roo, oportunidad de inversión pública no hubo en el resto.

Asimismo, que muchos municipios del sureste del país se despoblaron –mencionó–, porque a otras partes tuvo que salir la gente a buscarse la vida, tanto a estas islas de crecimiento, rodeadas de un mar de pobreza y de abandono, como al extranjero. La posibilidad de un crecimiento en esa región a través del turismo, significa este proyecto, que haya progreso con justicia, va a permitir el Tren Maya –señaló.

Es la modernidad, que forjada desde abajo y para todos nosotros sostenemos, porque beneficios para mucha gente, para los más olvidados, los más pobres, los más marginados, significa esto. Es producir riqueza, pero también distribuirla y a eso mucho ayuda el turismo –expresó el mandatario.

Aunque en diciembre será la inauguración del Tren Maya, por diversos factores se anticipó el traslado, pero destaca la renuncia de May Rodríguez al frente de Fonatur.

Comentó el Presidente, que desde hace 30 años que en el movimiento han estado, lo conoce y a ser gobernador de Tabasco aspira, asimismo, que presidente municipal de Comalcalco dos veces ya fue y ha sido senador y que es un hombre con principios y con ideales.

Por su parte, dio May en una intervención breve, el informe semanal del avance de la obra, en esta ocasión del tramo tres, Calkiní-Izamal, en el cual 159 kilómetros de vía se concluyeron y, conforme al programa, continúan las estaciones y paraderos.

Como usted, señor Presidente, el fin de semana constató, el Tren Maya funciona y recorrió la vía de Campeche a Cancún; sin duda, en diciembre de este año se inaugurará el Tren Maya –señaló.

Por otro lado y después del trayecto que este fin de semana el primer tren hizo, la Maestra Maite Ramos Gómez, directora general de Alstom (empresa que fabrica las unidades), expuso que se utilizó un tren modelo Chumbal, que es el estándar de cuatro coches y emplea diésel, sin embargo, al final de cuentas, es un tren completamente eléctrico –dijo.

Que un depósito de diésel de azufre tiene –explicó–, el cual en el momento en que llega al “PowerPack” –“Paquete de energía”, motor que en energía eléctrica ese diésel transforma–, a través del cual por un rectificador pasa y el voltaje de la energía eléctrica estabiliza en mil 400 voltios, que a todo el tren alimenta y lo convierte en un tren completamente eléctrico.

Asimismo –subrayó Ramos–, que en el trayecto de Campeche a Mérida y después de Mérida a Cancún –con una parada en Chichén Itzá–, dos aspectos centrales se probaron: el sistema de tracción y el frenado, con la puesta a punto de ambos.

Es decir, a baja velocidad se empieza. No podemos esperar que a 160 kilómetros de velocidad vayas en el primer recorrido, porque así no funciona. Poco a poco se va probando y las velocidades se van incrementando. Empieza con una velocidad más baja y el tren se va probando poco a poco, sobre todo en la dinámica ferroviaria –concluyó.